lunes, 13 de agosto de 2012

CERTEZAS de la piel /de Si tan solo existieras/









de Si tan solo existieras




CERTEZAS de la piel



 Ah si pudiéramos tocar
Ah si de verdad nos fuera / dado / amasarlas sonidos
Morder en gozo sus pensamientos
Debilitar la fortaleza con lenguas mensajeras /y de la piel:

Entonces la llegada del poder ahíto
paraliza nuestra ansia: no
Resuenan los clamores y quebrantos

Hebras /núbiles de velos /furtivas
nadie podrá derrotar la flaqueza poderosa
quel sudor siega en noches de consumaciones y de signos

Ni aunque el día llegara

El día que destruye la noche acogedora
La noche que hilacha días incautos y furtivos
pero /débil/ sin duda/ siempre asusta la tardanza
Siempre seguirás perdiendo:

Entonces el tiempo de la abundancia
de la nada
y el rechinar de dientes

Dónde estás?

Se te enfrían todos los huesos:
Tienes fiebre

Ah si pudiera atrapar tus sonidos en huída y destiempo

Dónde estás Sulamita?
Dónde?

Ni la retórica nos salva de tu piel y su esqueleto





  
  
  

4 comentarios:

  1. Ando revoloteando. Me gusta cuando la poesía se desbrujuliza, cuando los diálogos se lanzan sin paracaídas, para nadie, para quién, como de locos, como muy auténticos, como más reales que el hambre misma.

    Abrazos amigo

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  2. Hola amigo Jorge, Jorge Muzam, saludos cálidos.Un abrazo cálido.
    Razón tienes. A veces los textos se despercuden y salen crudos de hambre, y aunque uno lo sabe muy bien, a dónde pudieran ir... no es cosa de hacerlos personales... y salen a buscar acogida aunque no tengan a dónde llegar, ya se las arreglarán por su cuenta...

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  3. Gracias Fernando. disfruto de tu poesia,acompañada de exelente musica.Felicitaciones amigo

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    1. Hola Adriana. Adriana Carvajal Herrera: Me alegro que te agraden estos textos. Agradezco su comentario. Un abrazo.

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