(desde: (in) Precisiones e Incertidumbres
de esas Certeras y Subjetivas)
de esas Certeras y Subjetivas)
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REALIDADES
MÁS SIGNIFICANTES
Un ángel verde
apunta su rabo de terciopelo
bajo horizontes
de cenizas y palabras
hacia la
consumación del estruendo
yerto y no yerto medita
como si
siempre salvo / cuando in-existiendo
o en las rayas de
una máscara navegante
alcanza su
plenitud
de estrella o
rayo o gusano
Anota todo dijo al verme
Al momento
cambió de opinión
y se des-sombró
hacia otra
realidad áltera-posible
menos demandante
más austera en
su raíz de iridio y duda
menos armoniosa
donde puedas
invocarle nunca
porque un
silogismo a destiempo
le hizo perder
su raciocinio
y no le quedó
mas que recordar
melancólico
/como espejado
en lo invisible
argumentan los
seguidores de mitos/
linda
estuviera la cuna
cuadrada como
una escopeta
ni es mía ni
tuya
quién desafió
las pantuflas
Sí Cuál oso
la diestra desventura
los serenos
prados de eterna-idad
marginados del
tiempo
cual sucesión
arcangélica y rebelde
En fin ya estaba lejana
carente de
cualquiera posibilidad bulliciosa:
aterciopelada y
cenicienta:
Cuando La
Châtelaine angeliza:
y la plaza
demandaba terminantes
Como es sabido, hacia el final de la segunda década
del siglo XIX, y hasta existe un registro en 1819 que lo confirma, las huestes
celestiales comenzaron a ser diezmadas al compás de unas misteriosas
variaciones diabéllicas. Causaron estragos entre los tronos y las potestades;
las virtudes fueron depletadas de golpe y los principados casi borrados de la
faz del universo. Hacia finales del siglo XX ya eran muy pocos los serafines y
querubines que permanecían en sus deberes, y los ángeles y arcángeles habían prácticamente
desaparecido; las dominaciones se vieron poco afectadas hasta que apareció una
organización llamada YouTube que, se ha probado, coincidió con el incremento de
la tasa de exterminio. Para el siglo XXI se sospecha que sólo las cabezas de
alfileres de iridio son refugio para estas creaturas; pero también de esta
certeza corren dudas irrefutables.
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