desde: (in) PRECISIONES e
INCERTIDUMBRES
(de esas
Certeras y Subjetivas)
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DÍPTICO EN CORTOCIRCUITO
I
DESOLACIÓN
Un algo va refalando,
o nos devuelve
así como nueva nostalgia
o visión de ciudades perdidas:
Donde ya no
volverán ni siquiera a sufrir:
Ya ni esas
socorridas quejas, / o ritos
ni desarraigos o
ateridos.
Porque una
esterilidad, una colección de titubeos después del acoso
/ impide los
retornos / ni cuando contemplas
su devenir
desasida en la neblina del recuerdo
esas esquinas secas
/ sin humaredas
o esa sonrisa
que revuela nuestro tiempo perpetrada
a otra estación estéril,
o confluencias abolidas
en aquella
plazoleta donde su nombre olvidado
o su otro
compartir trascendencias ningunas.
Y no puedas
decir: Señor / Señor
porque además no
crees anatemas
ni puedes
rechazar aquello que no ocupa del ahora
cuando ya la
esperanza fue jugada y no en vano.
Ni siquiera por
+ amanecidas en la plaza
o los
anocheceres en su espera
tenga la vida
renuevos que salven
ni puedas
siquiera diciendo, o borroneando,
conjuros
necesarios a una deriva que no la atrapa
/ como si
entonces:
ella (aún
en pantalones pescadores que ceñían
sus
contornos)
amor (palabrita
asignada a cada trato, así que nada)
los terribles crisantemos (esos sí, ya esperados)
dios (en
menudito porque hubo muchos donde la elección
aún no logra rechazarlos a todos
lo
que sería la verdadera cordura)
libre (Pero
no tanto, nadie seguro, ni la que se auto- anula
/ bien pensada la cosa)
ni las amorosas fresias: Puesto que:
Nada
y Nada
y Nada
y sojuzgado Las
amorosasfresias lo sospechan.
II
ROBÓTICA
Pues hay en ti habitando otro
jugador de abalorios
más poderoso
más sutil en despojar los
silencios de la lengua:
Resonar remordimientos / sus
ecos
los punzantes recuerdos
aquellos decires bajo la parra o
el manzano
los tormentos esos rastros del festín
verbos como refocilos
grises y ardientes
esas idas al
estadio el insomnio semanal y
motos
signadas carencias donde la velocidad del saber
aleluyas y el ruido de la
espera
o los repasos en la covacha del
cuarto piso
esas cábalas de experta miseria:
esos antiguos y sabios
golpean como el odio
indulgente / fórmula ritual y
amorosa
sus muchas opacidades, porque no
hay huida:
e inducen en el juego del gran copero
y debes escuchar espinos / murciélagos / tarros en
conserva
y recuerdas donde el viento oscuro en el
cruce
no armonizan el habitar y las huidas
porque las
huellas de las orquídeas
surcadas no
conducen:
no son
blancas ni olorosas
y ya perduras atrapado en una especie de campana
de lodo
y arrastran el sojuzgamiento de los
deseos
oh poder conjetural perjurio y letanías, y sapos en la vereda
poderosos arrasar la montaña y la
paloma y el cientopiés
malévolos la acumulación de segundos,
de palomas
sutiles el confesionario
semanal, el clavo de olor
verbo encarnado o perjuicio de la vida / aunque
berenjenas
obsceno su queja, su oculta
lujuria, su encanto
velada,
entusiasmada sutiles en despojar o el
carrusel de muñecas
en atrapar la cordura / la riqueza
ritual / el jolgorio
como rastro de las
ausentes y varias insistencias
corpóreos podredumbres o exhuberantes
y gloriosas
tu lengua tu + perfecta
contrición, el pasado donde nubes
¿no hay quién te
silencie? Ya se fueron los lotos? las
coriáceas
sin mérito sin la perfección de
lo dudoso, con humo cortado
lagartijas soleándose en la
tina, atávicas
sirviendo para el arrepen-trito
que bifurca, o remache
como esas nubes informes, piñuflas y tan puras,
fuerzan a la más estéril
de las calendas donde
¿no hay quién te pueda perdonar
o te
certifique y un día?
Más profundo, penetra. Al fondo
del pique del 7.
Relleno más profundo: para aún
más adentro de la fresia.
Escuchas claro y confuso, poderosa,
como libélula,
llenas de vacíos / profusiones,
/insistencias,
y escuchas experto: BoooooooOMM
y es su silencio maldiciones
benditas, jaculatorias:
Oh inducen como griales
Oh conducen cual mariposas delicadas y siniestras
y elevan en esa
profunda escapada, por el lado de lo justo
donde ni puedes
descorchar, ni con anzuelos siquiera,
ni absolver sátrapas sagaces, / letanías y anillos
/
ni vaselina con olor a formas en piedras
diezmadas
ni decir, ni camarón: como misa,
como estaño, como cuento
que no diestra.
Oh debilidades
Oh carencias
O dios
Como el temple de Dios (que sólo
algunos escuchan, sus antenas
en la rapsodia
en la buscada explosiónprimitiva,
que, / como sabido, / no fue, ni
para septiembre o navidad)
Como
el resquicio
de las burbujas:
Algo así /
a no más de 4 o
5 grados Kelvin
que mucho mejor el
silencio que la condensación o el temple.
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